Antes que nada, creo preciso aclarar que, el contenido de este artículo, fue la base de mi participación como ponente en la charla coloquio, que se celebró el pasado 3 de diciembre de 2022 en el salón de actos de la Sociedad de Fomento y Cultura Minerva de Alumbres, en honor de Garrabino y Santa Bárbara.
La Sociedad Española de
la Dinamita (SED) nace en 1872, fundada por el grupo Alfred Nóbel, cuyo
objetivo era establecer una fábrica de dinamitas en España, e instaló varias en
Vizcaya, en especial Galdácano y Bilbao.
Era una época en la que
los explosivos eran necesarios para las explotaciones mineras y por esa razón,
el 2 de febrero de 1890 Miguel Zapata Sáez (el Tío Lobo) y Ricardo W.
Barrington, solicitan permiso al Ayuntamiento de Cartagena para instalar una fábrica de Ruborita en las inmediaciones
de la Media Legua que les fue denegada por la cercanía a la población.
No obstante, la
necesidad del producto hizo que los empresarios mineros insistieran, y consta,
que el 15 de marzo de 1890 fue aceptada la solicitud de los mismos empresarios,
para instalar la mencionada fábrica en el Coto Garrabino, cuyo propietario era
José Barceló residente en Alumbres, y que fue Concejal del Ayuntamiento de
Cartagena.
Tres años después, en 1893, estos
mismos empresarios, informan al Ayuntamiento, de haber traspasado la empresa a
Eugenio Juan Barbier, que había descubierto una forma más barata para producir
la Ruborita. Suprimió las costosísimas cámaras de plomo y condensadores de
platino, reemplazándolos por pequeños depósitos de arcilla refractaria de
fabricación especial.
En 1895 se inaugura la Fábrica Franco Española de
Explosivos (Garrabino), con Eugenio Juan Barbier como presidente en París y
Camilo Calamarí de director de la factoría, a cuyo acto asistió la prensa y
personalidades de la política y los negocios.
Fábrica de Explosivos en Alumbres-Garrabino. Foto: Casaú (Proyecto Carmesí)
A partir de aquí todo
se desarrolla muy deprisa y en 1896 se funda la UEE en la que se integran la
SED y Garrabino entre otras fábricas de la geografía española. Lo cual supuso una
profunda reorganización comercial y
financiera, por lo que fue necesario cerrar algunas de las plantas menos
rentables. Garrabino estableció un acuerdo por 15 años y en 1911 fue absorbida
por la UEE, momento en que Eugenio Juan Barbier pasó a formar parte del Consejo
de Administración.
Un año después, en 1897 la UEE
acuerda con el Gobierno convertirse en monopolio por 20 años, hasta 1917,
tiempo en el que no se pueden importar explosivos, y al no tener competencia en
el mercado los precios suben de manera que perjudica al sector minero que aunque
protesta le sirve de poco.
Entre 1900 y 1903, se nacionalizó
la UEE, al tener más acciones nacionales que extranjeras, por lo que la Junta
General comenzó a realizarse en Bilbao en lugar de París.
Arturo Mélida - Diana Cazadora
Gonzalo
Bilbao - En el Trigal
La apasionante historia de los
almanaques de Explosivos comienza en 1900, y se mantiene hasta la actualidad.
En realidad son obras de arte realizadas por pintores conocidos, algunos de
ellos repitieron varias veces, como Francisco Ribera que lo hizo en 13
ocasiones, Manuel Benedito 7 veces,
Domingo Huetos 4, Julio Romero de Torres 4, Cecilio Pla 3, y otros grandes,
Clara Gangutia, Mateo Charris, Gonzalo Bilbao, Eduardo Chillida, Arturo Mélida,
Guillermo Pérez Villalta, Emilio Sala, Elías Salaverría, etc.
El primer paso por la
diversificación de la producción se da en 1903 con la fundación de GEINCO
(Sociedad General de Industria y Comercio), que se domicilia en la misma sede
que la UEE, y ya no se dedicará solamente a explosivos, puesto que incluirá
Productos Químicos y Fertilizantes.
Continuando el plan de diversificación, en 1904, la UEE instala en el Hondón-Cartagena, una fábrica de Superfosfatos en antiguos terrenos de la Sociedad Franco Española.
Fábrica de El Hondón- Potasas y Derivados
Tanto durante el período de
monopolio como después se llevaron a cabo proyectos de diversificación, para lo
que fueron necesarias diversas materias primas, entre las que se cuenta la
pirita que procedía de las minas de Rio Tinto y era necesaria para la producción
de ácido sulfúrico, y éste a la vez, era materia prima para la producción de
explosivos y abonos. También fueron necesarios
los fosfatos que se trajeron de Marruecos y la
Potasa de las minas de Cardona, y en el apartado de los fertilizantes, los superfosfatos.
Curiosamente, antes
de ser alcalde de Cartagena Alfonso Torres López en 1923, desempeñaba el cargo
de ingeniero director de la Fábrica de Productos Químicos.
Santa Bárbara, es la
patrona de Explosivos, la minería, el cuerpo de Artillería y de los
electricistas, y a lo largo de la historia se ha celebrado ese día de
diferentes formas.
La celebración más antigua que conozco data de 1918 por medio de una noticia en la prensa de la época, que informa de la invitación de Camilo Calamarí, a todos los jefes de la empresa en su vivienda de S. Félix (Villa Calamarí), y otra por medio de una foto que me proporcionó Concepción Raja Álvarez, con fecha impresa de 1919. Ese día de Santa Bárbara, D. Camilo Calamarí que además de ser director de la Fábrica de Explosivos de Alumbres, era Cónsul de Italia en Cartagena, obsequió con un banquete a todos los empleados de su casa y a gran número de amigos, entre ellos al Cónsul de Francia, Mr. Valet y al ex alcalde Miguel Tovar.
Consta que, desde 1940, el día 4 de
diciembre de cada año, las empresas de explosivos de Cartagena, celebraron misas
y en muchas ocasiones, procesiones y convites de empleados, casi de forma
ininterrumpida hasta 1970, y a partir de 2014, se retomó la costumbre de celebrar
una misa y procesión de Santa Bárbara en Alumbres.
LA UEE
DURANTE LA GUERRA
Durante la guerra hubo crisis
para todo, por lo que en la UEE se redujo la producción en unos casos y se
paralizaron en otros.
La producción de los explosivos
se centraron mayoritariamente en material para abastecer a los ejércitos,
Galdácano, por ejemplo, fue tomada en 1937, y la Fábrica de Explosivos
contribuyó de manera especial a favor del ejército golpista.
El Consejo de Administración se
mostró partidario de apoyar a Franco desde el primer momento de la involución,
y algunos directivos se exiliaron a Francia.
LA UEE EN
LA POSTGUERRA
Como es sabido, en principio hubo
un cierto aislamiento internacional (autarquía), hasta 1961, si bien, tanto
Francia, como Inglaterra y EEUU, se apresuraron a reconocer al régimen
totalitario, y Estados Unidos, además, enseguida comenzó a colaborar con la
instalación de fábricas de Petróleos y productos alimenticios como la leche en
polvo.
En 1946, Garrabino producía dinamita y mechas, y La Ñora era una
instalación complementaria de Garrabino.
La UEE absorbió todas las
acciones y activos de la SED en 1948 por lo que ésta dejó de existir como
sociedad.
Desde 1949 la empresa se
estructura en 6 divisiones: Explosivos Civiles; Explosivos Militares, Minas,
Abonos, Productos Químicos y Estudios/Proyectos.
En la década de los
50 el Valle de Escombreras se convierte en complejo industrial por lo que entre
1956 y 1958 se construyen, La Térmica, Butano y el ferrocarril para el transporte
de productos del Valle.
El conocido Plan de
Estabilización se establece en 1959, con pérdida de protagonismo del INI
(Instituto Nacional de Industria) y el inminente desarrollo industrial, por lo
que en 1962 se construye Fertilizantes con capital de Repesa y dependiente de
ella, producía Amoniaco y abonos amoniacales, entre ellos Urea.
Abonos Complejos del Sureste (ASUR),
surge en 1969 con capital al 50% de UEE y Repesa. Producía ácido Nítrico,
Nitrato Amónico y Abonos Nitrogenados.
Abonos Complejos del Sureste (ASUR). Fotos: Francisco Atanasio
Hernández
La UERT, producto de la fusión de
la UEE y Minas de Río Tinto (Unión Española de Explosivos Río Tinto), se funda
el 24 de julio de 1970, siete bancos formaban parte del grupo empresarial,
entre ellos el Urquijo.
En 1971 Unión Española Río Tinto (UERT)
informa de la extensión de sus negocios en Cartagena, y que la fábrica del
Hondón produce Superfosfato, Sulfato de Potasa, Fosfato Bicálcico, Ácido
Sulfúrico y Ácido Clorhídrico, en la que trabajan 400 empleados.
Garrabino produce aproximadamente 5000
T/año de Nagolita, en la que trabajan 40 empleados.
En ASUR, Abonos Complejos del Sureste,
se fabrican abonos nitrogenados y está compartida con Repesa al 50%. Con una
plantilla alrededor de los 170 trabajadores
Período difícil éste, porque a
mediados de la década se juntó la crisis económica, devaluación de la peseta,
(en 1975, 66 Pts. el dólar, en 1982 112 Pts.) con la crisis del sistema político,
incluida la muerte del dictador, incremento del paro, incremento del coste de
la vida, evasión de capitales, Fraude fiscal, cierre de pequeñas empresas,
concentración empresarial.
Santa Bárbara en su hornacina de la iglesia de Alumbres. Foto:
Francisco Atanasio Hernández
Y ya en los primeros años de la
era democrática se produce una Reconversión
ficticia en el sector en 1984, que en realidad supuso una inyección de capital
de las arcas públicas para mejorar los medios de producción, que no se
cumplieron, por lo que al final de la década volvió a surgir la crisis que duró
hasta desmantelar la mayor parte de las fábricas de abonos.
En 1988 la fusión de ERT-CROSS, supone un cambio de
denominación del grupo, que pasa a llamarse ERCROS, y también el inicio de una
nueva crisis.
A partir de 1989, empieza a
asomar la cabeza otra crisis, y ya no parará hasta el concurso de acreedores
(suspensión de pagos) en 1992 que amenaza con acabar con el Sector
Fertilizantes de Cartagena.
En esas fechas vuelve a surgir la
UEE sólo para la división de explosivos militares y civiles, la cual también
llevó a cabo una reestructuración que produjo cierre de algunas fábricas como
Garrabino en 1997, y reducción de personal que pasó de 2600 a 1300 empleados.
En 1993, en lo que se refiere a Cartagena,
se cerró parcialmente la fábrica del Hondón (cuya denominación entonces era
Potasas y Derivados) totalmente Fertilizantes, quedando las esferas de amoniaco
a cargo de Fertiberia (Asur), que también sufrió una restructuración de
personal y de producción.
La suspensión de pagos se levantó
en 1994, y el grupo fue adquirido por Fertiberia dirigida por Villar Mir, por
8000 millones de Pts., cuando sólo la fábrica de Sagunto recientemente
instalada en 1988 costó más de 12 mil millones de Pts.
Quedaron en funcionamiento parte
del Hondón hasta 2001 en que dejó de producir definitivamente, Asur
reestructurada hasta 2004, fecha en que también cerró, la fábrica de Sagunto,
otra en Asturias, Puerto Llano y Huelva.
La UEE, dedicada exclusivamente a
la producción de explosivos, cambió de denominación en 2006, llamándose en
adelante MAXAM y se expandió por el mundo y así sigue hasta la fecha.
Fuentes consultadas y/o utilizadas
Libros
-Alfonso Ballesteros.
Unión Española de
Explosivos-150 años de la empresa que fundó Alfred Nóbel.
-Diego Victoria
Moreno. La dictadura de Primo de Rivera
1923-1930 (Historia Contemporánea de Cartagena, dirigida por Pedro Mª. Egea
Bruno. Tomo II)
-Francisco Atanasio Hernández. Alumbres algunas historias pendientes.
-Francisco Atanasio Hernández. Retazos de la historia de Alumbres.
-Francisco Atanasio Hernández. Alumbres en el siglo XX.
Documentos
-Archivo Municipal de Cartagena. Actas Municipales década de 1890.
-Francisco Atanasio Hernández. Cien años de la fábrica de Garrabino (artículo publicado).
Prensa
-Archivo Municipal de Cartagena. El Eco de Cartagena.
-Fotos
-Calendarios de Explosivos.
-Casaú .
-Francisco Atanasio Hernández.
Buenas noches estimado Francisco muy interesante el articulo publicado, me gustaría contactar con usted para hacerle una consulta de la historia de Alumbres, gracias!
ResponderEliminarHola, no tengo el gusto de conocerte, no obstante, siempre respondo, así que puedes contactar conmigo mandándome un correo y te respondere. pacoatanasio@hotmail.com
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